Existen infinidad de críticas hacia la moda, y ni se cuenten aquellas en contra del alcoholismo… Pero lo cierto, es que ambas juegan un rol extremadamente importante dentro de la sociedad; es más, podría afirmar que, si no existieran estos elementos, la población de la humanidad se vería reducida a, por lo menos, la mitad de su tamaño actual.
En primera, la moda no es algo que simplemente busque la estética en el vestir; se trata de ingenio, de estrategia, de experimentar, de conocerse a sí mismo para ver qué es lo que mejor le cuadra a uno mismo y, así, lograr descollar sobre los demás y, entonces, conquistar al hombre o mujer ideal. Y tal vez es por ello que existen tantos modos distintos de vestir: los hay “fresas”, “fachionistas”, “hippies”, “darks”, “emos”, “metaleros”, “kitsch”, “hipster”, “punketos”, etcétera… Cada quien se centra en cierto estilo que cree que le va más a su personalidad. Todos buscamos ese mejor modo de resaltar nuestras cualidades para atraer al sexo opuesto: el atleta usará ropa deportiva, mientras el intelectual vestirá un tipo “beatnik”.
Los diseños de la ropa han evolucionado a tal grado que puede incluso resaltar cualidades que no poseemos (sobre todo en las mujeres), como pantalones para moldear los glúteos o “bras” con relleno espumoso. Ya desde siglos atrás podíamos ver los famosos corsés como modo de mostrar un cuerpo más escultural y, así, atraer a los más ricos condes de la nobleza.
De este modo, aquel que no es muy atractivo físicamente, tiene la oportunidad de compensar aquello vistiéndose de modo que pueda enaltecer ciertas bondades que le haya regalado la naturaleza.
Estoy seguro que la mayoría de las personas se decepciona del amante en cuanto lo ve desnudo, ya que tendemos a idealizar la forma humana que nos antojan las ropas con las que viste el individuo… La mayoría prefiere tener sexo con la luz apagada o baja por miedo a que sus defectos sean descubiertos… Siempre hay algún defecto en la desnudez humana… y eso… eso es algo divino, pues nos vuelve más y más únicos, ya no sólo intelectualmente, sino también físicamente .
Ahora, en cuanto al alcohol, éste es un desinhibidor por excelencia. Con el alcohol nos atrevemos a más que cuando sobrios; cuando bebemos todo parece más viable y hay menos arrepentimiento… por lo menos mientras dure el efecto… El alcohol minimiza la humanidad del hombre mientras multiplica el deseo animal: Lo que sobrio lo piensas dos veces, cuando ebrio ni siquiera lo piensas una sola vez.
Alguien sin mucho atractivo que sabe vestir acorde a su personalidad, y una persona ebria con un físico socialmente deseable, pueden terminar en la cama juntos… Si no fuera por la moda y el alcohol, según la teoría de la evolución de Darwin, en la cual los más adaptados sobreviven, probablemente ahora el mundo estaría poblado de poca gente y, en su mayoría, altamente atractiva…
Querido lector, te invito a ser un poco más curioso en cuanto a la moda y a respetar un poco más al alcohol, pues así tendrás la sabiduría suficiente para tener las riendas sobre los ilusos…
Que tengas una excelente semana...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Comentarios? Por favor...